Recepción y gestión de stock: Control de entradas y salidas de materiales, verificando la calidad y cantidad de los productos almacenados.Preparación de pedidos: Organización y embalaje de los materiales para su distribución, asegurando la correcta carga y descarga de los productos.Mantenimiento del almacén: Orden y limpieza del área de trabajo, cumplimiento de normativas de seguridad y uso adecuado de equipos como carretillas y transpaletas.